Somos una comunidad comprometida con la protección, preservación y recuperación de nuestro ecosistema. Nos unimos en un propósito común: devolverle vida a este importante espacio natural que ha sido olvidado y maltratado durante años. Cada uno de nosotros, con nuestra experiencia, conocimiento y pasión, somos parte fundamental de este esfuerzo colectivo para salvar el humedal, no solo para nosotros, sino para las generaciones futuras.
Venimos de diversas historias y recorridos, pero nos une una misma causa: el amor por la naturaleza, el respeto por el entorno y la necesidad urgente de actuar. Somos vecinos, estudiantes, profesionales, y personas de la comunidad local que, al igual que la tingua azul que vive entre nosotros, sabemos que este lugar es nuestro hogar. Sabemos que cada rincón del humedal tiene algo que ofrecer: desde sus aguas hasta sus plantas y animales, cada elemento es vital para el equilibrio natural.
A través de la Escuela de Comunicación Comunitaria, hemos aprendido a usar nuestras voces y nuestras herramientas para defender el humedal. A través de la educación, la organización y el trabajo en conjunto, buscamos empoderar a más personas, sensibilizar a la comunidad y generar acciones concretas que ayuden a restaurar y proteger el humedal. Sabemos que la lucha no es fácil, pero creemos que cada esfuerzo, cada pequeño paso que damos, contribuye a un futuro más sostenible.
Nuestra misión es clara: queremos dejar un legado de conciencia ambiental, de trabajo comunitario y de respeto por la naturaleza. Los Guardianes del Humedal somos todos aquellos que, con acciones simples pero firmes, luchamos por mantener vivo este espacio, defendiendo su importancia ecológica y cultural. Aquí no solo defendemos un humedal; defendemos nuestra identidad, nuestra comunidad y nuestra casa.
Y, como cada uno de nosotros, sabemos que nuestro trabajo aún tiene mucho por hacer. Juntos, vamos a seguir protegiendo lo que es nuestro.